domingo, 12 de diciembre de 2010

Comprar un e-reader

Este artículo trata de recopilar todo lo que es necesario saber para comprar un e-reader. Repasa aspectos como los tipos de pantallas, los formatos de lectura, la compra de libros y otras funcionalidades extra...


¿ Qué es un e-reader?

Simplemente, es un aparato que permite leer libros electrónicos (e-books). Los libros electrónicos son archivos digitales que contienen un libro (y por extensión, revistas, periódicos, cómics, etc.). Las ventajas del libro electrónico son las propias de la digitalización de un contenido: copiado y reproducción ilimitados, el contenido no se deteriora y puede ser transmitido por medios electrónicos.
En el caso de un libro electrónico, esto es como si las bibliotecas, los kioscos y las tiendas de libros estuvieran en cualquier sitio (gracias a Internet), dispusieran de ejemplares ilimitados y los ejemplares no se deterioraran (los que usamos la capacidad de préstamo de las bibliotecas, estamos acostumbrados a leer libros “maltratados”). Además, la digitalización trae consigo ventajas indirectas como la reducción de costes de producción y por ende la democratización del mismo (todo el mundo puede ser editor/distribuidor de sus publicaciones), por no hablar del enriquecimiento de la información transmitida debido a los aportes de la comunidad y las redes sociales.
Un libro electrónico puede ser leído en multitud de dispositivos: ordenadores, teléfonos móviles, tablets (como el ipad) etc. Sin embargo, el e-reader es un aparato diseñado específicamente para la lectura de libros, aunque puede contener funcionalidad extra. Es por esto por lo que las pantallas de un lector de libros electrónicos están pensadas para leer textos durante mucho tiempo: carecen de reflejos, no emiten luz y se ven perfectamente a plena luz del día. Indirectamente, tenemos otra ventaja: el consumo de batería es mucho menor. Por contra, las pantallas de papel electrónico no son buenas representando colores y animaciones.

Las marcas

Existen muchas marcas que fabrican e-readers. Algunas de ellas en realidad no fabrican directamente sino que remarcan dispositivos fabricados en china. Esa es la razón por la que en el mercado, podemos ver el mismo aparato con distintos nombres y con variaciones muy pequeñas, principalmente en su software.
Las principales marcas son: Amazon (con su Kindle), Barns&Noble (con su Nook) Sony y Papyre. Últimamente, han aparecido nuevas marcas como Samsung, Booq, Cool-er, Boox y otras. Casi todo el mundo está de acuerdo en que Kindle es la mejor opción en relación calidad-precio. Sony representa el segmento de mercado con mejor acabado (y precios elevados). Samsung tiene unos dispositivos muy bonitos pero también muy caros. Papyre es el decano de la venta en España.
Se ha de tener en cuenta que todos los dispositivos, sean de la marca que sean, cuentan con las mismas pantallas porque hoy por hoy, existen pocos fabricantes.

¿ Qué tipos de pantallas existen en el mercado?

Actualmente en el mercado existen tres tipos de pantalla: las antiguas e-ink, las siPix (otra marca) y las Pearl (las últimas de e-link). Las más nuevas y de mejor calidad son las Pearl, que tienen mayor contraste (los negros son más negros). SiPix tiene la ventaja de ser más barata pero su funcionamiento hace que sea algo menos precisa a la hora de representar las imágenes.
Las pantallas de papel electrónico son frágiles. Los fabricantes se defienden diciendo que en realidad, el índice de rotura es muy parecido al de las pantallas para móviles y ordenadores portátiles. Al parecer, las pantallas son poco resistentes a la torsión, lo que hace que se rompan cuando van sueltas en un bolso o cuando el dispositivo se cae de canto. Sospecho que esta es la razón por la que existen muy pocos dispositivos de más de siete pulgadas. Personalmente, creo que la rotura depende también de otros factores, como la calidad de fabricación de la carcasa (que es distinta de cada marca y modelo). Los fabricantes tratan de abaratar costes y hacer el dispositivo más ligero, lo que puede comprometer la solidez. Además, es difícil cubrir la pantalla con un protector sin que eso repercuta en la calidad de visualización del papel electrónico. La solución pasa por cuidar el dispositivo y comprar una funda rígida (las fundas de neopreno que vienen de serie en algunos aparatos no suelen serlo).
En relación al tamaño, hay pantallas de 5, 6, 7 (Sony), 9 (siPix) y 9.7 (e-ink) pulgadas. El tamaño más común es 6 pulgadas. Una pantalla de este tamaño es, para hacernos una idea, del mismo tamaño que ¼ de un folio. Las pantallas de 9.7 pulgadas son del mismo tamaño que ½ de un folio. Se ha de tener en cuenta que 6 pulgadas es suficiente para leer noveles pero no para leer archivos pdf en formato de mayor tamaño. Esto es debido a que en el formato pdf estándar, las páginas de un libro siempre tienen el mismo tamaño, por lo que para verlas en un dispositivo pequeño se ha de hacer zoom, lo que hace engorrosa la lectura. Cuanto mayores sean las necesidades de maquetado de la publicación, más necesario será tener una pantalla grande. Como una novela casi no tiene maquetado, puede leerse sin problemas en seis pulgadas. Los dispositivos cuentan con formatos que re-paginan de forma automática para permitir aumentar o disminuir el tamaño de letra y la cantidad de texto.

También existen algunos dispositivos que usan como base pantallas LCD como las de los ordenadores portátiles. Desde mi punto de vista, la compra de estos dispositivos no tienen mucho sentido puesto que no cuentan con las ventajas de los e-readers basados en papel electrónico pero si con sus inconvenientes (tienen una funcionalidad limitada y la duración de la batería es escasa). Si deseas un aparato más versátil, no vas a leer mucho y siempre lo vas a hacer bajo techo, hay otros excelentes dispositivos en el mercado como el iPad u otros tablets. Posiblemente, la razón por la que existen e-readers con LCD es simplemente porque son más baratos de fabricar que los que usan papel electrónico.
En teoría, están a punto de salir nuevas tecnologías como el papel electrónico a color, Pixel Qi (que es una pantalla LCD especial que tiene un modo de funcionamiento muy parecido al del papel electrónico) y Mirasol.

Los formatos y el DRM

Casi todos los lectores del mercado leen varios formatos: txt, html, doc, ePub/MOBI, pdf, etc. Lo más interesante es que lean ePub, un formato abierto basado en xml que se ha convertido en el estándar de facto. Los dispositivos de Amazon no leen ePub pero si MOBI, otro formato similar. La conversión de uno a otro es automática (usando software como Calibre, que es además gratuito), por lo que esto, siendo una desventaja no es crítica.
En el caso del formato pdf, para que sea práctico, el lector debe contar con un buen soporte para estos archivos: búsqueda de palabras, zoom, capacidad de abrir pdfs con contraseña, etc.
Aunque todos los dispositivos pueden leer contenidos no protegidos (libros de dominio público o documentos privados), las editoriales y por extensión, las tiendas de libros distribuyen los contenidos de forma protegida, para que no puedan ser leídos si no has pagado por los mismos. Esto es básicamente el DRM. Existen dos sistemas DRM distintos, el de Adobe y el propio de Amazon. En España, las editoriales (por medio de Libranda) usan el primero lo que hace que por el momento, la oferta de libros electrónicos de editoriales españolas sea escasa en Amazon, lo que no quiere decir que Amazon no disponga de libros en nuestra lengua. De la misma forma, puede ser que otros libros (sobre todo en ingles) solo se distribuyan por el canal de Amazon y no puedan ser comprados si tu dispositivo no soporta ese formato. En resumen, mientras no haya acuerdo, tanto Amazon como las editoriales españolas fijan sus propias restricciones que son incompatibles por lo que si vamos a comprar libros, deberemos elegir el lector que se adapte a la tienda en la que vamos a comprar.
En la práctica, el DRM es un incordio para el cliente final. Yo, como cliente, compro un libro que solo puedo leer en un dispositivo concreto y solamente yo. Al final, el sistema no vale de nada porque usuarios descontentos quitan el DRM de los libros que compran y los colocan a disposición de todos en Internet.

Las funcionalidades extra

Muchos lectores cuentan con funcionalidades extra. Paso a comentar las más comunes y su utilidad. Cada uno, como comprador, hará hincapié en una u otra, según sus necesidades:
Funciones de búsqueda y anotación. Muchos dispositivos permiten hacer búsquedas y anotaciones sobre los libros electrónicos (será necesario que el dispositivo disponga de teclado, ya sea físico o real).
Reproductor mp3. Como es barato, casi todos los lectores disponen de esta funcionalidad. Obviamente, si usas tu lector como reproductor de mp3, tendrás que cambiar la batería con mucha más frecuencia.
Audio-libro. Las reproducción mp3 permite escuchar con el lector audio-libros. Algunos lectores más avanzados, disponen de un sintetizador de voz que es capaz de leer los libros y documentos almacenados en el dispositivo, aunque por el momento, esta funcionalidad no está disponible en castellano.
Wifi-3G. Permite navegar por Internet (de forma algo rudimentaria, dadas las limitaciones de la pantalla), comprar libros etc. Los dispositivos de Amazon disponen de conexión 3G gratuita, lo que te permite comprar el periódico o una novela en cualquier sitio. En España, el 3G está limitado, por lo que no se puede navegar.
Pantalla táctil. Mejora la usabilidad del aparato, aunque puede añadir reflejos a la pantalla. El resultado es el mismo que el de los teléfonos móviles que sustituyen el teclado por una pantalla táctil.
Aplicaciones extra. Algunos dispositivos cuentan con navegador web, pueden conectarse con Facebook y Twitter para comentar un párrafo, tienen bloc de notas e incluso juegos.



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